Por Juan Antonio Fornasier
Paso River con un empate y ahora viene Atlanta al Cilindro, con las ansias de descontar dos puntos de los 6 que le llevamos por que solo faltan 5 fechas para el final.
Hoy es Miércoles 1 de Noviembre de 1961(feriado día de todos los Santos), y Boca jugó ayer martes goleando 6 a 0 a Chacarita en su estadio. Hoy estamos pendientes por el Alumni del partido que en Avda La Plata jugarán San Lorenzo que viene segundo, con los Amargos y de la Ciudad de Rosario donde juegan River con Central.
Amanece un día un poco gris que se va despejando hacia media mañana, como siempre salimos temprano porque a las 11.15 tenemos una cita de honor, ver a la tercera de oro para deleitarnos con el buen fútbol y los goles.
Hoy el Cilindro es una fiesta, mucha, mucha gente de Racing, pensar que no había butacas, y la capacidad del cilindro estaba en las cien mil personas.
Los gritos y cánticos de los hinchas se sentían desde fuera del estadio, donde la gente caminaba desde la estación Avellaneda por esas extensas cuadras y conversaba como si se conocieran de hace mucho, apurando el paso con cada exclamación o grito de gol de los que ya estaban dentro.
También la gente que venia en Micro desde Avda. Mitre convergiendo en el cilindro y pasando por todos esos puestos de chorizan que se iban armando para los que venían sin haber almorzado cosa que muchos hacían a propósito para poder disfrutar alli de un delicioso sándwich.
En el ambiente flotaba la alegría del Racing Campeón, nadie lo decía, por cábala, pero todos en su intimidad sabíamos que esta año si, dábamos la vuelta y no a fin del torneo.
La mañana comenzó con una sinfonía de la tercera de oro, regalándonos un rotundo 6 a 0, que festejamos. Siempre lamentábamos el pitazo final aunque fuéramos ganado porque el fútbol que veíamos era excelente.
Luego la reserva que no recuerdo el resultado y llegando a las 15 horas ya el estadio estaba no digo repleto pero con muy pocos claros. Abajo detrás del arco estábamos mas apretados que de costumbre, nadie se podía sentar a esa hora.
La salida del equipo fue espectacular, la gente enloqueció ni bien Racing salio del túnel.
Yo diría antes de que salga porque en ese tiempo había dos o tres en la salida que miraban hacia abajo y con sus gestos nos hacían saber cuando el equipo aparecería, uno de ellos enloquecía de tal manera que la gente comenzaba a gritar antes de ver a los jugadores.
Los resultados que se pudieron ver en el Alumni de otras canchas eran: en Avda La Plata los Amargos le ganaban a San Lorenzo 1 a 0 y los alejaban del segundo lugar, pero en Rosario River que estaba cuarto a dos puntos de San Lorenzo y Atlanta le ganaba 4 a 2 a Central con 2 goles de Onega y se colocaba junto a San Lorenzo.
En el Cilindro Racing no perdió la oportunidad y con un soberbio cabezazo de “El Marques” Rubén Sosa y un golazo de Peano ganaba 2 a 0 y se alejaba nuevamente de sus perseguidores. Ese día a la salida la alegría desbordaba las calles angostas de los alrededores del Cilindro, todos se abrazaban y festejaban de antemano casi sin decirlo pero si vislumbraba un Racing Campeón pero por muerte.
El equipo jugaba bien, y ganaba si se lo proponía, gustaba y daba espectáculo, era realmente un equipo, formado por un plantel de jugadores muy pequeño porque siempre jugaban los mismos, otra razón para que el equipo funcionara.
La tabla había que dado asi: Racing puntero con 40 y luego River, Atlanta y San Lorenzo con 32, quinto Boca con 30.
A esa altura habíamos convertido 54 goles con solo 25 en contra, lo que daba un promedio de 2,16 por partido.
El que seguía en goles a favor era Boca con 47 y River la valla menos vencida con 24.
La próxima, el domingo 5 de Noviembre, deberíamos ir a Liniers, a jugar con Vélez, un partido arto difícil, siempre Vélez nos costó pero íbamos con mucha fe y mucha ventaja como para estar tranquilos. Boca iba al sur a jugar con Lanús, River recibía a Los Andes San Lorenzo en Boedo jugaría con Gimnasia, y Atlanta en Paternal jugaría con Central.
Estábamos muy ansiosos, en una más, estaríamos jugando con San Lorenzo en el Cilindro, que lindo sería dar la vuelta delante de los de Boedo, sobre todo por la pica que había con el nene Sanfilipo que nunca nos podía ganar, y se calentaba muy feo, y además pocas veces nos hacía goles a pesar de ser el goleador del torneo.
Racing estaba cerca de ofrecer a su hinchada el mejor campeonato de la historia y plantar la semilla del Racing Campeón del Mundo del 66.
No se pierda la culminación del torneo, hay algunas sorpresas…….
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